El libro de agosto: Historia de O
Mientras nos adentramos en la segunda quincena de agosto, esa en la que el calor todavía aprieta pero el final de las vacaciones ya puede verse en el horizonte, vamos a estrenar una sección nueva en el blog. Esta sección, por supuesto, estará centrada tanto en la literatura como en lo erótico, pues a través de ella os ofreceremos cada mes la reseña y recomendación de una novela de literatura erótica. En nuestra primera entrega empezamos con un clásico de obligada lectura, Historia de O, pero, a lo largo de los próximos meses, os ofreceremos no solo clásicos, sino también nuevas publicaciones. ¡Hay de todo en el menú!
Historia de O, la novela, fue escrita en los años cincuenta por Pauline Réage, nombre que no era más que el seudónimo de la autora, Anne Desclos, y fue publicada el 1954. Esta fascinante historia, claramente de temática bdsm, nos presenta a una joven conocida simplemente como O, quien por amor ingresa en una hermandad bdsm con la intención de satisfacer así a René, su amante. Este camino, recorrido, insistimos, por amor, la llevará a convertirse en un juguete sexual, en un objeto que sufrirá no solo todo tipo de vejaciones como sumisa, sino que también se verá involucrada en actividades sadomasoquistas y en mucho, muchísimo más. ¡Conviene advertir que no es apto para mentes sensibles!
Como curiosidad cabe destacar que en esta novela aparece el posteriormente llamado Anillo de O, uno de los símbolos más característicos del bdsm y que suele ser lucido por la sumisa después de que el Amo se lo regale como símbolo de la relación D/s existente entre ambos. Existen sin embargo diferentes versiones de este anillo, desde el liso y sencillo decorado con el triskel céltico, anillo descrito en la novela, hasta uno con una argolla que es más bien característico de la película, pasando por diferentes versiones del mismo. En cualquier caso, la simbología siempre es la misma: la relación D/s entre dos personas.
Uno de los motivos de que esta novela cosechase el gran éxito que tuvo fue, sin lugar a dudas, la posterior influencia de la versión cinematográfica, Historia de O, de 1975.
Pese a que tanto la novela como la película se han convertido en símbolos del bdsm (no hay más que ver el ya mencionado ejemplo del anillo), en ellas encontramos algunas prácticas no exentas de controversia, sobre todo para aquellos que desconocen cómo funciona el mundo bdms. Entre algunas de esas prácticas, repetidas hasta la saciedad en posteriores novelas, relatos y películas, encontramos la de anillar los labios inferiores de la sumisa, el compartir a esta con otras personas, quemar a la sumisa con cigarrillos o incluso marcarla a fuego con las iniciales del Amo, prácticas que, si bien pueden darse en el bdsm, conviene recordar que son minoritarias y que, además, siempre deben contar con la conformidad de la sumisa, pues, de lo contrario, dejaríamos de hablar de bdsm para hablar de otra cosa muy diferente y que roza o incluso alcanza el nivel de abuso. Recordad, y esto es fundamental, que el bdsm siempre debe ser sano, seguro y consensuado. En otros artículos ya hemos mencionado esto, pero no nos canseremos nunca de repetirlo, pues tan solo así podemos desligar al bdsm de las connotaciones de abuso y maltrato que, por regla general, se les atribuye desde el desconocimiento.
¿Sabéis qué? La semana que viene hablaremos de esto con más profundidad, pues es fundamental conocerlo bien antes de embarcarse en cualquier tipo de relación bdsm. ¡Así que estad atentos a la página web!