¿Quién soy?

Xakura O´Hara.

Bienvenidos a una parte de mi mundo literario más perverso y excitante, queridos lectores y curiosos. En Erótica Xakura podéis ser libres de soñar o de encontrar ese pequeño empujón que os hacía falta para romper vuestras cadenas y llevaros el valor de tratar de hacer realidad vuestros sueños más sensuales, prohibidos y secretos.

Reclamo vuestra generosidad y colaboración para dar aliento a mis historias, pues no soy ni seré nada sin vosotros. Lo sabéis, ¿verdad? Mi imaginación es toda vuestra. Os invito a adentraros en ella.

XAKURA O'HARA nace en Madrid en 2018, aunque realmente mi alter ego nació mucho tiempo antes, en un tiempo en que no todo era más fácil que ahora, pero sí muy distinto. Internet no existía, y sin embargo ahora solo existe lo que en él subsiste y brilla. ¿Pero qué importa? A una mujer nunca se le pregunta su edad. Baste con que digamos que soy mayor de edad para casi todas las cosas, aunque para otras... creo que nunca lo llegaré a ser.

Xakura es fruto de mis sueños y mi curiosidad insaciable, pues soy una mujer pasional a la que le gusta soñar despierta, experimentar, viajar y vivir sin arrepentimientos; porque, si uno se arrepiente, no vive. Y, lo que es peor, no sueña. Tan solo respira y duerme. Pero Xakura sueña a dentelladas su vida.

Sobre todo Xakura nace de mi amor por la escritura, porque escribir es el único hábito o juego en el que podemos moldear a nuestro gusto el destino, aunque sea precariamente y a través de las vidas de otros, de aquellos a los que, con palabras y sueños, damos vida. Escribir a veces es profetizar lo que aún está por suceder y solo nos atrevemos a soñar. 

Y vosotros, ¿os aventuráis a soñar junto a mí?

Sobre mi nombre.

¿Por qué escogí el pseudónimo de Xakura O'Hara?:

El nombre cobró cuerpo en una tórrida noche de verano, una cálida noche en la que, al no poder dormir, mi mente divagaba libre bajo las sábanas. Aquella noche pensaba en mi viaje a Japón y en lo mucho que me gustaría volver a visitar su archipiélago de nuevo, y pensaba en la belleza de los cerezos en flor, en su colorido sutil y profuso sobre las ramas cuando explota la primavera. Una cosa llevó a la otra. Xakura hace referencia a mi pasión por Japón. La flor del cerezo representa la pureza y, a la vez, la fuerza de la feminidad más exultante, al tiempo que su mágica visión nos hace pensar en que su delicada y pequeña presencia nos esconde una esencia, quizás misteriosa y callada, igual que con primor sus florecillas envuelven las ramas del cerezo y lo adornan con sus sonrosados pétalos de terciopelo. Sí, así es Xakura: una pequeña y preciosa flor que dará frutos deliciosos de un rojo provocativo, madurados lentamente al sol.

La otra parte de la ecuación, el apellido O´Hara, rinde un tributo evidente a un personaje de ficción de la escritora Margaret Mitchell. Xakura O´Hara trata de ser el espejo de la mujer independiente y aparentemente dura y hasta frívola, según la tacharan algunos; una mujer que, ante sus fracasos, si es que lo eran, tan solo seguía adelante, convencida de que al final vencería a las adversidades. Una mujer que haría lo que estuviera en sus manos por hacerse con el destino que ella había soñado para sí misma. Ese espíritu indómito y reivindicativo de sus propios deseos, aunque muchos no compartieran su forma de concebir su vida, es lo que hizo que Xakura le rindiera con su apellido un pequeño homenaje a aquella inolvidable Scarlett O`Hara, de la obra Lo que el viento se llevó. Sí, es mi heroína, lo confieso; el espejo en el que me gustaría reflejarme cuando las cosas se ponen feas y cuesta arriba. Por eso, en mis obras encontraréis casi siempre a una mujer con ese espíritu rebelde e inquebrantable ante su destino.

Recomendaciones.

No quería pasar la ocasión desde este pequeño rincón de intimidad para recomendaros otra película, no muy conocida: Ángel, dirigida por François Ozón en 2007, a mi entender deliciosa y bien llevada, que narra el ascenso y caída de una excéntrica escritora. Pero lo importante no es el argumento, sino la moraleja que nos ofrece: que si uno cree en sus sueños, puede que su fe le haga alcanzarlos tarde o temprano. Así que recordadlo, y os invito a perseguir vuestros sueños, porque no hay nada imposible en la vida, tan solo cosas que no hemos intentado realizar.

Por otra parte, si Xakura tuviera que escoger una canción para definirse, se acordaría de la letra de una de las canciones de Alaska: A quién le importa. ¿La conocéis? Es un himno de independencia, de libertad y de fortaleza, porque es todo un reto no dejarse arrastrar fácilmente por lo que seduce a la mayoría y ser distinta a muchos, aunque aparentemente no lo parezca y me mimetice como buen camaleón con el resto del común de los mortales, pero merece la pena intentar siempre ser distinto, pues es lo que nos hace ser únicos y no una burda copia de otros. Así que, como decía la canción que tan bien cantaba Alaska: "Yo soy así, y así seguiré, nunca cambiaré". Al menos lo intentaré, mientras la mente y el cuerpo aguanten el ritmo, y vosotros, mis lectores, me acompañéis y sigáis mis historias.

Erótica Xakura.

Xakura, a través de Erótica Xakura, muestra al mundo sus otros mundos, y como buena anfitriona os invita a que os atreváis a seguirla por ellos, por su laberinto. ¿Estáis dispuestos? ¿Seguro? Os aguardo en el fondo de mis páginas y os entrego el hilo para que podáis salir del laberinto de mis deseos, mis lectores Teseos, sin más daño que el que queráis aceptar, pues en mi laberinto quizás se esconde el minotauro. Pero no temáis al dolor, pues solo es fantasía lo que sentís, así que entrad y disfrutad.